Árbitros de la LIFGE, aseguran que siguen sin cobrar "hasta hoy no hay solución. Nos están toreando”

Los árbitros de la Liga de Fútbol de Guinea Ecuatorial (LIFGE) han denunciado recientemente que continúan sin recibir los honorarios correspondientes a la temporada 2024-2025, a pesar de los compromisos de pago asumidos por la Federación Ecuatoguineana de Fútbol (FEGUIFUT).

“Hasta hoy no hay solución. Nos prometieron que en julio y agosto nos pagarían, pero no han cumplido. Hace poco nos dijeron que antes del fin de semana del 9 de agosto tendríamos el dinero, y seguimos esperando. Nos están toreando”, declaró uno de los colegiados que participó en la liguilla.

Hace tres semanas, el departamento de comunicación de la FEGUIFUT informó que ya se había abonado el 50% de la deuda antes del inicio de la liguilla. Sin embargo, los mismos árbitros desmintieron la versión. “El presidente nos comunicó que el dinero estaba disponible y que se pagaría el 50%. Nos dijeron que no habíamos cobrado porque el coordinador estaba en Bata”, señalaron.

En contacto con este medio, el coordinador general de los árbitros, Agustín Edjang, aseguró el pasado 1 de agosto que “ya hay dinero en la federación” y que la demora se debía a que él, encargado de elaborar las nóminas, se encontraba en la parte continental. “He adelantado mi viaje a Malabo para depositar las nóminas y pagar a los árbitros. Si hasta ahora no han cobrado es por mí”, afirmó entonces.

No obstante, siete días después de sus declaraciones, los colegiados siguen sin cobrar, lo que han calificado como “una burla” al colectivo arbitral. Según información recabada, la FEGUIFUT pagaba inicialmente 160.000 XAF por partido (40.000 XAF para cada uno de los cuatro oficiales), pero tras tres jornadas optó por acumular los pagos hasta el final de la temporada.

Ante el aumento de la deuda, los árbitros decidieron suspender su participación hasta recibir los pagos, lo que llevó al presidente de la FEGUIFUT a intervenir personalmente y prometer saldar la deuda en julio y agosto.

La situación genera incertidumbre, ya que el 30 de agosto se celebrarán elecciones en la FEGUIFUT. Los árbitros temen que, si el actual presidente no es reelegido, el nuevo directivo no asuma la deuda. Por ahora, la federación no se ha vuelto a pronunciar, y los árbitros continúan sin recibir sus honorarios.